La meditación es una práctica que busca cultivar la atención plena y la calma mental. Aquí te proporcionaré una guía básica para comenzar a meditar:
Busca un lugar tranquilo y en lo posible silencioso, donde puedas sentarte cómodamente sin distracciones. Puede ser un rincón de tu casa, un jardín o cualquier espacio donde te sientas relajado.
Adopta una postura cómoda. Siéntate en una silla con la espalda recta o en la posición de postura fácil en el suelo y con una manta, utilizando un almohadón para acomodar correctamente tu columna. Asegúrate de que tu postura sea estable pero relajada.
Cierra los ojos suavemente y toma algunas respiraciones profundas para relajar tu cuerpo. Luego, enfoca tu atención en diferentes partes de tu cuerpo, comenzando desde los pies y avanzando gradualmente hacia la cabeza, observa y relaja cada músculo a medida que avanzas. Dirige tu atención hacia tu respiración. Siéntete completamente presente en cada inhalación y exhalación. Observa cómo el aire entra y sale de tu cuerpo, sintiendo las sensaciones en tu nariz, pecho o abdomen mientras respiras de forma natural y sin esfuerzo.
A medida que meditas, es natural que surjan pensamientos, emociones o distracciones. En lugar de tratar de evitarlos, simplemente obsérvalos sin juzgar y déjalos pasar. Luego, vuelve suavemente tu atención a la respiración. La clave es cultivar una actitud de aceptación y amabilidad hacia cualquier experiencia que surja. Cultiva la atención plena cada día.
Al principio, la duración de tu meditación puedes comenzar con sesiones cortas de 5 a 11 minutos e ir aumentando gradualmente a medida que te sientas más cómodo/a. Utiliza un temporizador para no preocuparte por el tiempo y poder centrarte en tu práctica.
Para obtener los beneficios de la meditación, es recomendable ser consistente en tu práctica. Intenta meditar diariamente, aunque sea por un corto período de tiempo. Con el tiempo, la meditación se convertirá en una parte natural de tu rutina diaria.
Recuerda que la meditación es un proceso personal, y cada uno puede tener su enfoque preferido o necesario.
En Kundalini Yoga existen muchísimas series de meditaciones, y para cada necesidad. Meditaciones de atención plena (mindfulness), con mantra o un pranayama y mudra determinado, meditaciones y/o baño de gong, la meditación en movimiento (como la caminata yóguica-Breathwalk), y las profundas meditaciones como también transformadoras son los renacimientos. La variación de meditaciones que existen en esta disciplina, hace que se vuelva rica y profunda cada enseñanza transmitida. Explora diferentes enfoques, la experiencia es lo que te encamina.
Encuentra lo que mejor que se adapte a ti en el momento que lo sientas.