RECONSTRUYÉNDOTE A TI MISMO

La vida que tienes es tuya, eres dueña/o de tu propio destino, y esta en ti transformarlo.

La vida es un continúo aprendizaje que nos obliga a hacer cambios y ampliar nuestras estrategias, y las herramientas de Kundalini Yoga nos ayuda adelantarnos, o estar más preparados para los retos que nos sorprenden, y que vamos sorteando a lo largo de los años.

Renovar el Ser, es un continuo trabajo que te va dando una sensación fresca y activa que te reanima a seguir creando y creándote. Comienzas a sentir que eres otra/o y, con un sostén firme en tus pies que te impulsan a ir hacia adelante y con una sonrisa de satisfacción. Esto es el comienzo de una nueva transformación de ti.

Permanecer en diferentes estados que la mente te propone, mantenerte en el juego de la mente, ella termina manipulándote, porque te hace creer en ese vacío que sientes; en la insatisfacción al mirar fuera de ti, a otros; estar en la dualidad constante que te hace saber que no hay un sentimiento de alegría, que no tienes la adorada paz interior.

Cuando te decides a sentarte, respirar profundo y guardar silencio, comienzas a conectarte con tu cuerpo, y poco a poco ir aquietando tu mente, a medida que tu respiración se hace más y más pausada. Esto te permite observarte como, por ejemplo, qué sientes frente a algo que deseas enfrentar y encontrarte con tus límites. También las creencias que mantienes y, que hoy debes reconfigurarlas para lidiar con ellas o erradicar alguna.

Al impregnarte en ese profundo silencio interior, comienzas a conocerte y reconoces, lo que realmente te limita para hacer lo que sientes. Luego llega la aceptación de ti y de tu entorno, como también rendirte ante ti porque reconoces que hay una fuerza mayor que no puedes controlar; y frente a esto, con una disciplina de trabajo para tu cuerpo y mente, vas entrando en una nueva transformación de ti, y poco a poco en un nuevo ser.

Esta meditación (Ver video) va acompañada con un pranayama determinado que va ayudar a renovar tu ser y tu sistema. Hazlo de manera consciente. Puedes comenzar con 3 minutos e ir extendiendo cada día hasta llegar a completar los 15 minutos. Tenemos la capacidad de reconstruirnos a nosotros mismos, de la cual raras veces hacemos uso.

En cada respiración, reconstrúyete. Olvídate de todo lo que te rodea y concéntrate en tu respiración. Mantén el cuerpo estable en la postura con la columna recta, y deja que los cambios ocurran. Une tú energía a la fuente, proyéctate más allá de todo y expande tu horizonte.

Deja un comentario

Scroll al inicio